Lípulo, menta, orégano, muña y palo dulce

EL LUPULO, LA MENTA, EL OREGANO, LA MUÑA Y EL PALO DULCE

El lúpulo es muy conocido en nuestro país y su cosecha es también de buena renta económica. Su cultivo se extiende por casi todo nuestro territorio y es indispensable para la fabricación de una beb¡da muy conocida: la cerveza.

Si bien en algunos lugares el lúpulo crece de forma espontánea -las sierras cordobesas- en la mayoría de los lugares se la cultiva en forma consecuente. Es de fragancia aromática y a pesar de su sabor amargo su empleo como aperitivo sigue siendo común. Contra indigestiones. dispepsia y reumatismo, la recomiendan como efectiva, pero también tiene adeptos que la usan corno diurético y enfermedades varias de la vejiga. La parte mas utilizada son las flores.
La menta es otra. Cuando se escucha la pronunciación de la palabra se piensa espontáneamente en un caramelo, pero esta pequeña planta que es originaria de Europa y hoy se la encuentra en forma natural en todo nuestro país, no fue nunca exclusiva para la fabricación de caramelos, confites o bebidas: sus bondades, al, menos las primeras conocidas por el hombre, fueron de Juan uso específicamente curativo. Aparte de ser un buen digestivo y calmante para todos los malestares del estómago, anula también las diarreas y los vómitos. Hay quienes la emplean particularmente con el mate, agregando una hoja de menta a la yerba, pues facilita la digestión y controla la acidez que a veces produce el mate de bombilla. Entre sus nombres vulgares se encuentran estos: “yerba mota”, “mote yuyo”, “piperita”, en Corrientes se llama “cabará-caa”.
Muña-Muña y Orégano
Los serranos tienen a una labiada muy popular entre ellos: la muña-muña. Varias canciones nativas la nombran como un afrodisíaco por sus propiedades y crece espontáneamente en Salta, Jujuy. Tucumán. La Rioja y Corrientes. Lo más comprobable de la muña-muña es su efectividad para los dolores de vientre, los calambres intestinales y los cólicos, el resto quizás no supere las necesidades y fantasías del momento.
Otra de las labiadas que tienen historia: el orégano. Como curativa se la emplea desde hace muchísimos años en forma de tónico intestinal, estimulante, antiespasmódico. También para afecciones del aparato respiratorio, sobre todo las afecciones crónicas, y combate los catarros bronquiales y el asma. Sin embargo el orégano tiene su uso asegurado corno especia. Es una de ellas casi insustituible en la mayoría de las comidas y salsas. Esta cualidad última ha hecho que se la fuera dejando de lado en el aspecto medicamentoso.
Palo dulce u Orozúz
Los niños de Mendoza, San Juan y parte de La Pampa suelen chupar un palito al que le llaman palo dulce. El tiene esa asombrosa cualidad. A la planta que produce ese sabor la llaman orozúz, pero no es el original. Es, podríamos decir, una excelente copia de la Giycyrrhiza Giabra L. que es en definitiva el verdadero orozúz.
Pero dejando de lado estas cosas pequeñas (pequeñas al menos para los niños pues solamente les interesa el palito de la planta como caramelo), esta tiene la particularidad de ser casi la doble de otra, tiene un sinnúmero de aplicaciones como aliviante y curativa. Es expectorante mayormente, pero también es efectivo su uso como diurético, pues excita la secreción de la orina limpiando los riñones y vías urinarias inferiores. Hay quienes en un pedazo de palito dulce han encontrado el antídoto contra el cigarrillo, pero también como la menta el orázuz es parte importantísima en la producción de golosinas y esto ha hecho que se la conozca más en ese terreno que en su uso original. Los niños siempre estarán eternamente agradecidos.



René Darán
Fuente: Diario La Capital. Sección Flora y Fauna de Nuestro País /1984/87
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