Escobar

Esta nota, si bien no está dedicada exclusivamente a una planta o una flor, tiene el interés de brindar un pequeño homenaje a una ciudad que ha dedicado todo el esfuerzo al cultivo, al estudio de las plantas y las flores hasta convertirse en la capital nacional de la flor.
Algo de historia:

La denominación oficial de esta ciudad, situada a la vera de la ruta nacional Nº 9, y a 50 km. de la Capital Federal, es Belén de Escobar. Primitivamente la población se llamaba Belén y Escobar era el nombre de la estación de ferrocarril. En el año 1960, se fusionaron y se llamó Belén de Escobar. Y hoy la conocemos como Escobar, Capital Nacional de la Flor.
La merced otorgada en 1582 por don Juan de Garay al regidor del Cabildo de Buenos Aires, don Juan Alonso de Escobar, dio origen para que esta zona comenzara a llamarse “Isla de Escobar” o “Cañada de Escobar”.
Muchos años después, estas tierras fueron adquiridas por doña Eugenia Tapia de Cruz, quien fundó en 1873 un poblado que llamó Belén; la estación de ferrocarril se llamaba Escobar.
El 4 de octubre de 1959, fue creado el partido de Escobar, formándose con tierras y poblaciones sobre las que antes tenían jurisdicción los partidos de Tigre y Pilar.
Hoy día, el partido de Escobar, además de tantas cosas que posee, alberga importantes industrias como La Ford Motors Co (posee parte de sus instalaciones en dicho partido); Gilette, Grafea, Champion, Alba, Sylvapen, Cabsha, Parke Davis, Purina, Atma y muchas otras.
Sobre la pesca, y sus lugares preferenciales para esta actividad hablaremos en una próxima nota.
En ésta, trataremos de una actividad realmente maravillosa que se realiza en este partido, el cultivo de las plantas y las flores, y sobre todo, la historia de esta actividad en dicha zona.
¿Quiénes comenzaron esta magnífica y fructífera actividad? Pues, fueron los colonos japoneses. En el año 1929 comienza la radicación de los primeros colonos japoneses dedicados a la floricultura. Por ejemplo, en junio de ese año se afincó el señor Kuhei Gashu, luego Hisaki que en sociedad con Arturo Sanguinetti, comenzaron la actividad floricultura. Y así, se fueron estableciendo otras familias, y de esta manera, japoneses y autóctonos fueron forjando una actividad que llevó a convertir el partido en “Capital Nacional de la Flor”.
¿Cómo trabaja esta gente? Un floricultor viaja por distintos países para estudiar las distintas formas, investigar, conocer los descubrimientos actuales y así, luego, volcarlos aquí.
Casi todos los floricultores exportan a distintos países, por vía aérea; poseen en sus establecimientos cámaras frigoríficas para almacenamiento de flores y conservación de bulbos, bombas centrífugas para extracción de agua para riego, invernáculos e instalaciones especiales, tractores y maquinarias diversas, adecuadas para cada necesidad.
Como ejemplo veamos el cultivo de una planta. El cultivo de claveles. Una vez podada la planta de claveles y obtenidos los gajos (sin raíces) debe procurarse que éstos desarrollen su sistema radicular, con lo cual cada gajo será una nueva plantita independiente y que cada una de éstas dará hermosos claveles. Los gajos en estos invernaderos se plantan en una mezcla de ceniza volcánica y turba. La ceniza procede de Chile y la turba de Mendoza o importada de Alemania. Esta mezcla es sometida a un proceso de desinfección.
Los gajos son plantados en octubre, de esta manera, la primera floración se produce en invierno, cuando el precio de los claveles tiene buena cotización.
El riego es controlado por relojes en forma automática, una vez que la planta hecha raíces es transplantada a almácigos de tierra firme. Esta tierra convenientemente ha sido preparada para que la planta se desarrolle con todo vigor.
Del 4 al 12 de octubre, se realiza en Escobar, por decreto nacional 7424, del 22 de septiembre de 1964, que otorga a Escobar el título de Capital Nacional de la Flor, justamente la Fiesta de la Flor.
Este departamento, como cualquier otro, que brindó su mano a la colectividad nipona que trajo consigo su entrañable calidez humana, su reconocida paciencia, sus conocimientos; se asocia a ella, y así convirtió un departamento en un mundo de color y una importante fuente de divisas para la nación.
Un ejemplo digno de admiración, y ejemplo para imitar.



René Darán
Fuente: Diario La Capital. Sección Flora y Fauna de Nuestro País /1984/87
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